adblue

AdBlue es un sistema de combustible que reduce las emisiones de los vehículos. Se trata de un líquido azul inodoro formado por agua y urea, que recicla los gases de escape del vehículo para reducir la emisión de NOx (óxido de nitrógeno). Al entrar en el motor, se descompone en amonio y dióxido de nitrógeno, lo que contribuye a reducir el daño que causa esta emisión. AdBlue le permite al motor funcionar con menor cantidad de combustible, por lo que no solo reduce las emisiones nocivas, sino que también mejora el rendimiento de combustible y la economía del vehículo.

¿Cómo cumple su función?

AdBlue es un líquido de formulación especial que se emplea en vehículos diésel para reducir su emisión de óxidos de nitrógeno, uno de los principales contaminantes de la atmósfera. Es una mezcla de urea al 32,5% en agua destilada y está disponible en envases de 10, 20 y 1000 litros. La urea, un compuesto químico orgánico, es utilizada como fertilizante para reducir los niveles de los óxidos de nitrógeno nocivos. El AdBlue se almacena en un depósito especial y se inyecta en el flujo de gases de escape, donde absorbe los óxidos de nitrógeno. Mediante la reacción química de la urea con los contaminantes del aire, la emisión de óxidos de nitrógeno en el escape se reduce hasta el 80%.

AdBlue es totalmente seguro para su vehículo y el medio ambiente, ya que no contiene sabor ni olores. Debe ser almacenado en depósitos absolutamente limpios y secos, lejos de la luz solar directa y cualquier calor excesivo, para garantizar su eficacia. Asimismo, es importante asegurarse de que el líquido no se congele, pues a bajas temperaturas dejará de funcionar.

Es necesario rellenar el depósito con AdBlue cada vez que el nivel baje, para garantizar un rendimiento óptimo del coche. Lo más recomendable es que el líquido se cambie de forma regular para obtener siempre los mejores resultados. Si no rellenamos el depósito con AdBlue, el motor dejará de funcionar y no tendremos la menor duda de que ha llegado el momento de hacerlo.

Detalles a tener en cuenta

AdBlue es una solución de uree y agua prácticamente limpia, y su uso ha demostrado reducir significativamente la cantidad de emisiones de nitrógeno (NOx) de los vehículos modernos. Algunos modelos de vehículos euro 6c diezmado tienen un AdBlue ubicado en el exterior del vehículo, para tener un fácil acceso para la recarga. En estos vehículos es importante prestar especial atención a los niveles de AdBlue para evitar una insuficiencia que pudiera provocar una avería y el encendido de una luz de aviso. El objetivo es que esté lo suficientemente lleno para que el motor de tu vehículo funcione correctamente aunque el nivel puede variar. Además, hay que tener en cuenta que hay un suficiente tiempo de caducidad para AdBlue, por lo que hay que asegurarse de usar solo AdBlue recién comprados.

Además, la recarga de AdBlue debe realizarse con el motor apagado para evitar un embarazoso escape que pueda dañar carrocerías o coronas cercanas. Los sistemas de recarga de Adblue de los vehículos modernos están diseñados para controlar el llenado de la solución AdBlue y asegurar un llenado correcto en el autobús. Si el vehículo no funciona con AdBlue, el vehículo no tendrá la misma eficiencia general por lo que es necesario que tengas siempre una reserva de AdBlue disponible para usar en cualquier situación.

Es importante tener en cuenta que los productos de AdBlue no están creados por igual, por lo tanto, es necesario buscar siempre la mejor calidad de AdBlue en el mercado. Esta calidad puede ser cuantificada por una cantidad física específica de urea, además de un pH y un contenido de conductividad entre otros. Además, la temperatura adecuada de AdBlue también es importante para la experiencia de conducción. Si el AdBlue se utiliza a temperaturas extremas por debajo de -11° C (12° F) entonces su capacidad disminuirá considerablemente.

¿Qué Pasa Si Se Acaba el Adblue?

Si el Adblue se acaba, el patrón de la luz de Adblue se enciende, pero sólo si el nivel del líquido está por debajo del 10%. Aunque el motor seguirá siendo un poco más sucio, la mayoría de los sistemas modernos pueden circular de 12.000 a 15.000 kilómetros antes de que el nivel de emisiones supere los límites máximos permitidos. Si bien el coche seguirá funcionando durante algún tiempo, el nivel de emisiones se incrementará y, por tanto, debe rellenarse el Adblue lo antes posible.

Además, el sistema de Adblue puede estar equipado con algunos dispositivos de corte de seguridad, cuyo objetivo es evitar el uso prolongado del coche sin el Adblue. Estas incluyen la desactivación del sistema de escape de la SCR, generalmente luego de 1.200 kilómetros. Esta medida implica que el coche funcionará sin mods y que el control de emisiones estará desactivado.

En última instancia, se recomienda encarecidamente rellenar el recipiente con el Adblue para evitar problemas mayores en el motor y no quedar a merced de limitaciones temporales. Para las reposiciones a largo plazo, es aconsejable conservar en la guantera del coche un recipiente de Adblue para rellenar cuando sea necesario.

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