La ayuda al arranque en pendiente es una característica disponible en algunos vehículos que permite al conductor ayudar a un vehículo a moverse cuando este se ha detenido en una subida o pendiente pronunciada. Esta característica hace que el motor gire a una velocidad más rápida y los frenos se suelen ajustar automáticamente de acuerdo con la inclinación del vehículo para evitar que el vehículo se desplace hacia atrás. Esto reduce la resistencia del motor y facilita el arranque en pendientes. Esta característica es especialmente útil cuando un vehículo está parado en una subida empinada, evitando así que los conductores tengan que esforzarse para arrancar el vehículo en estas condiciones.
La ayuda al arranque en pendiente, a veces llamada control de pendientes, es una tecnología de automóviles que ayuda al conductor a salir de parado en una pendiente pronunciada. Consiste en un sistema mecánico o electrónico que mantiene los frenos aplicados ligeramente luego de la parada, hasta que el motor recibe una señal para que el conductor acelere con el equipo en funcionamiento.
La ayuda al arranque en pendiente suele ser una función estándar en los automóviles con tracción total y tracción trasera, y una opción en algunos modelos con tracción delantera. En la mayoría de los casos, el sistema opera automáticamente sin necesidad de activar un interruptor para encender o apagar la característica.
La ayuda al arranque en pendiente es útil para los conductores inexperimentados y aquellos que no tienen mucha fuerza en los brazos, piernas o pies. El sistema les ayuda a salir de la parada sin que se deslice el vehículo durante el arranque. También evita las sacudidas que suelen ocurrir cuando el conductor recurre solo al acelerador o al embrague al presionar el pedal de arranque.
Aunque la ayuda al arranque en pendiente no es una función obligatoria para conducir en pendientes pronunciadas, puede ser una ayuda importante para asegurar una partida segura al conductor y al vehículo.
El asistente de arranque en pendiente es un sistema que ayuda al conductor a arranque el vehículo cuando se enfrenta a una subida pronunciada. El sistema se basa en combinar un motor eléctrico y un accionador mecánico, los cuales trabajan conjuntamente para ayudar al motor a subir por una cuesta o zanja. Este dispositivo se activa de manera automática cuando se detecta un grado de inclinación superior a un 15 %, relajando el par motor que se necesita para subir la pendiente y permitiendo que el vehículo tenga velocidad y se mueva sin problemas. Los asistentes de arranque en pendiente funcionan a través de un sistema de ordenador, el cual se encarga de controlar ejecutar la operación de forma segura.
El asistente de arranque en pendiente ofrece numerosas ventajas, desde ahorro de combustible y menor desgaste del motor, hasta mayores niveles de seguridad. La principal ventaja es que el usuario no tiene que preocuparse por conseguir la energía suficiente para iniciarse en una empinada, permitiéndole circular con más seguridad en carreteras de montaña, carreteras de pendientes cuesta arriba y vías con calles sinuosas. Algunos asistentes de arranque en pendiente cuentan con un sistema de frenos, el cual permite que el vehículo se detenga automáticamente al superar la pendiente.
Quizás, la mayor ventaja de los asistentes de arranque en pendiente es la mejora de la capacidad de respuesta al conductor, ya que el dispositivo toma decisiones de manera automática si detecta algún obstáculo en el camino. Además, el asistente de arranque en pendiente reduce el desgaste del motor, esto es debido a que el usuario no tiene que preocuparse por obtener una determinada aceleración para subir una cuesta e incluso podrá frenar la bajada con menos esfuerzo.