El carburante es el combustible usado por los vehículos para poder funcionar. Se refiere a los líquidos, como la gasolina, el diésel y los biocombustibles, entre otros. Estos combustibles son quemados en la cámara de combustión para generar la energía necesaria para mover el vehículo. Además, el carburante contiene componentes especiales que contribuyen a mejorar el desempeño del motor.
Carburante es un líquido combustible usado para alimentar vehículos. Está fabricado a partir de diez del petróleo, gas natural, alcoholes y/o eléctricidad. El carburante es una mezcla de productos químicos deribados del petróleo, con un contenido de fallas no mayor a diez partes por millón. Esta mezcla química es responsable de proporcionar energía a los vehículos para poder moverse.
Los tipos de carburante más comunes son la gasolina, el etanol, el gas natural licuado (GNL) y el diésel. Cada uno de los tipos de carburante tiene características especiales, como el grado octanómico, la densidad, el contenido de oxígeno, la capacidad de combustión y la cantidad de energía que pueden proporcionar. Algunos vehículos modernos también tienen la capacidad de usar una combinación de carburantes distintos, dependiendo de las necesidades del usuario.
Uno de los conceptos más importantes para entender el carburante es el rendimiento, que significa cuánta energía el motor recibe por cada medida de combustible. Esto es importante porque ahorros de carburante significan mayor ahorro de dinero y menor impacto ambiental. Además, existen tecnologías como motores de combustión interna alternativos (ICA), que permiten a los vehículos usar menos carburante y producir menos emisiones.
El carburante se refiere al combustible utilizado para la manipulación de motores de combustión interna en vehículos como automóviles, camiones, motocicletas, barcos, aviones y otros. Existen diferentes tipos de carburante que se diferencian principalmente por su composición y por lo se les otorga propiedades específicas para la operación adecuada de los diversos motores.
Los combustibles comunes para la operación de automóviles, camiones y motocicletas son la gasolina, la gasolina mezclada con etanol (gasohol), la gasolina complementada con un aditivo para reducir la contaminación (hibrido), el diésel y el gas natural (GNV).
Los barcos a bordo tienen dos principales carburantes, gasoil y gas Oil, cuyos nombres se refieren a la densidad de los carburantes. El diésel, también conocido como “gasoil”, es un carburante más denso y tiende a ser más barato que el gas Oil. Los cohetes, satellites y la mayoría de los aviones comerciales y militares utilizan queroseno como principio de combustible. El queroseno es un derivado del petróleo con alta velocidad de combustión, particularmente adecuado para la combustión cuando el motor se enciende durante despegues a alta velocidad. Los combustibles modernos usados en vehículos dispersan menos compuestos dañinos en la atmósfera.