El doble embrague, comúnmente abreviado como DSG, es un sistema de cambios de velocidades para automóviles. Está diseñado para mejorar la eficiencia, la versatilidad y la comodidad del conductor. Utiliza dos embragues para controlar múltiples engranajes, que permiten un cambio de velocidad más rápido es decir, sin interrupción de potencia del motor. Esto resulta en un mejor rendimiento y una conducción más suave, permitiendo al conductor aprovechar mejor su automóvil.
El doble embrague es un sistema de transmisión de vehículos mecánicos, integral para los sistemas automáticos o semiautomáticos. Su función principal es mejorar el desempeño, la potencia y la eficiencia de los vehículos. Está compuesto por dos embragues separados que se conocen como balde y buje, que permiten pasar la energía producida por el motor al cambio de velocidades sin una interrupción en el flujo de fuerza.
En una transmisión convencional, la interrupción se produce naturalmente cuando el embrague se engancha para permitir que el motor transmita energía al resto del vehículo, mientras que en una transmisión de doble embrague, dos engranajes sincronizados se intercambian de forma suave, permitiendo así una transición fluida entre las marchas.
En una transmisión con doble embrague, los giros del motor alcanzan un punto alto antes de que los engranajes cambien, lo que proporciona un cambio más rápido entre marchas. Debido a esto, una transmisión de doble embrague puede producir una mejor aceleración y velocidad de cambio al mismo tiempo, lo que la hace más eficiente. Además, también se utiliza para transmitir la fuerza del motor a los neumáticos de forma más suave sin una interrupción.
Las transmisiones de doble embrague se han popularizado en automóviles modernos con una variedad de integración y diseño, y están en proceso de adaptarse a otros vehículos tales como camiones, autobuses y barcos.
Una caja de cambios de doble embrague consta de dos conversores de par, el primario y el secundario. Estos dos elementos se unen a los engranajes y al árbol de salida, lo que hace que sea posible cambiar de una marcha a otra sin afectar al régimen del motor. Esto significa que el paso de una marcha a otra suele resultar suave y eficiente.
Los dos embragues se activan por separado para realizar los cambios de marcha. El embrague primario envía al motor el par necesario para iniciar la aceleración, mientras que el embrague secundario se encarga de desacoplar una marcha y acoplar la siguiente. La tracción al automóvil para obtener la velocidad se realiza a través del embrague primario, mientras que el embrague secundario realiza los cambios de marcha, permitiendo que el vehículo continúe acelerando sin tener que soltar el embrague.
En cuanto a los tipos de caja de cambios de doble embrague hay principalmente dos: DTI, denominadas “cambio de doble embrague independiente” y DCT, también conocidos como “cambio de doble embrague conmutado”. La diferencia entre uno y otro es que el DCT usa un único embrague para traer y llevar, por lo que los cambios de marcha son más rápidos. Sin embargo, el DTI ofrece una mayor fiabilidad.
Los cambios de doble embrague también presentan algunas desventajas. Por ejemplo, suelen ser más caros que los cambios automáticos convencionales, aunque tienen menos piezas móviles y son más ligeros. Además, el hecho de que una compañía de autobuses necesite dos embragues puede ser un inconveniente para aquellos que carecen de la experiencia adecuada para cambiar las marchas correctamente.