Los dispositivos anticontaminación en vehículos son sistemas diseñados para reducir la contaminación generada por los gases de escape. Estos dispositivos van integrados al motor del vehículo y se caracterizan por limpiar tanto los gases producidos por el motor como por el combustible. Se dividen en tres categorías principales: dispositivos de filtrado de aire, reducción de gases de escape y líquidos de tratamiento del gas. Estos sistemas son cruciales para mejorar el medio ambiente y la calidad de aire.
Los dispositivos de anticontaminación son sistemas instalados en vehículos para reducir los niveles de emisión y proteger el medio ambiente disminuyendo la cantidad de emisiones tóxicas liberadas al aire. Estos dispositivos proporcionan uno de los mecanismos básicos para cumplir con los estrictos requisitos de emisión de varios organismos de vigilancia. Entre los estandartes más comunes de los dispositivos anticontaminación se encuentran los convertidores catalíticos, los filtros de partículas y los recirculadores de gases de escape.
Los convertidores catalíticos se instalan en los tubos de escape de la mayoría de los vehículos modernos. Están diseñados para descomponer los gases nocivos en productos más favorables al medio ambiente mediante la adición de sales de níquel, platino y/o paladio. Estos dispositivos tienen una expectativa de vida útil de al menos cuatro años, dependiendo del uso y del estilo de conducción del conductor. Un filtro de partículas, también conocido como DPF, se instala en los automóviles ligeros diesel y está diseñado para filtrar los gases de escape, reduciendo así la cantidad de material particulado que se libera al aire.
Los recirculadores de gases de escape son dispositivos montados en los automóviles con varios propósitos. Por un lado, aumentan la eficiencia del combustible al recircular los gases de escape hacia la cámara de combustión en lugar de permitir su escape directamente al aire. Esto reduce la cantidad de emisiones nocivas. Además, también se usan para reducir los niveles de ruido y mejorar el rendimiento. El uso de estos dispositivos también ayuda a mantener los motores limpios al filtrar los gases de escape.
Los dispositivos anticontaminantes ayudan a reducir o incluso matar diferentes tipos de contaminación, tales como el monóxido de carbono, los óxidos de nitrógeno, los compuestos orgánicos volátiles (COV) y los hidrocarburos. Estos son algunos de los materiales químicos más dañinos que existen en el aire, tanto para la salud humana como para el ambiente. Los dispositivos anticontaminación ayudan a reducir la cantidad de materiales químicos nocivos presentes en el aire, permitiendo que el aire se mantenga limpio y saludable para respirar.
Los dispositivos anticontaminación reducen significativamente las partículas suspendidas en el aire, algo que es particularmente importante en áreas urbanas donde el aire es mucho más contaminado. Los dispositivos anticontaminación también reducen los niveles de óxidos de nitrógeno y los compuestos orgánicos volátiles (COV), que contribuyen al Smog. Al reducir los contaminantes mencionados, los dispositivos anticontaminación ayudan a limitar las emisiones de gases de efecto invernadero, que a su vez contribuyen al calentamiento global.
Los dispositivos anticontaminación también ayudan a reducir los niveles de hidrocarburos y otros materiales tóxicos presentes en el aire, reduciendo el riesgo potencial de que el aire sea dañino para respirar. Esto se debe a que dichos materiales pueden desencadenar enfermedades respiratorias, alérgicas y cardíacas. Asimismo, los dispositivos anticontaminación también ayudan a reducir los niveles de óxidos de azufre y material particulado fino que contribuyen a la lluvia ácida.
Además de los materiales químicos mencionados anteriormente, los dispositivos anticontaminación también mejoran los niveles de aire limpio al permitir que las partículas microscópicas sean filtradas. Cuando estas partículas microscópicas se filtran, disminuye el riesgo de que el aire contenga bacteria, virus u otros microbios que pueden ser potencialmente dañinos para la salud.
Los dispositivos anticontaminación pretenden reducir la cantidad de partículas y gases dañinos producidos por los vehículos con motores de combustión. Existen varios tipos de dispositivos disponibles para ayudar a combatir los efectos negativos de la emisión de gases. Estos dispositivos se pueden encontrar en la parte delantera, trasera y lateral del vehículo.
Los dispositivos anticontaminación más comunes son los filtros de combustible, los catalizadores, los convertidores catalíticos, los filtros de partículas y los dispositivos de recirculación de los gases de escape. Los filtros de combustible ayudan a reducir la cantidad de partículas y gases dañinos en el aire al filtrar los vapores de combustible. Los catalizadores ayudan a mejorar la combustión de los gases de escape al convertir los gases dañinos en productos menos dañinos. Los convertidores catalíticos trabajan de la misma forma que los catalizadores, pero también pueden filtrar los vapor de combustible. Los filtros de partículas ayudan a reducir la cantidad de partículas nocivas en el aire al filtrar el humo. El dispositivo de recirculación de los gases de escape ayuda a mejorar la combustión al reducir la cantidad de gases de escape emitidos y ayuda a reducir la emisión de óxidos de nitrógeno.
Además, hay otros dispositivos anticontaminantes, como los sensores de oxígeno que ayudan a reducir la cantidad de partículas y gases dañinos en el aire al realizar mediciones rápidas de la concentración de los gases de escape. Los inyectores de combustible también se pueden usar para controlar la cantidad de combustible utilizado para reducir la cantidad de partículas en el aire. También existen cápsulas detonantes, que controlan la combustión para producir cantidades menores deÓxidos de nitrógeno y partículas producidas por los vehículos.