La instalación para GLP en un vehículo es una adaptación para poder utilizar gas licuado de petróleo como combustible alternativo. Esta instalación consta de un depósito para el GLP, una válvula reguladora, una toma para conectar el tanque al interior, un intercambiador de calor para aumentar la temperatura de vaporización del GLP, un dispositivo para inyectar el combustible en los cilindros y una válvula para desplazar el aire comprimido que realiza el funcionamiento del motor.
La instalacion para GLP significa Gas Licuado de Petróleo, y es la instalacion de un sistema para vehículos que se alimentan con gas natural licuado, también conocido como GLP. Esta instalación es cada vez más común en los autos, camiones, e incluso camionetas. El GLP se usa como combustible alternativo, por lo que la adquisición de una instalación para GLP es una forma de contribuir a una vida más sostenible.
Las instalaciones para GLP se instalan en el vehículo mediante una conexión directa. Esto incluye un tubo de conexión a la red de GLP y una conexión de salida a la boquilla de GLP. La instalación GLP también comprende la instalación de un tanque de almacenamiento de GLP adecuado. El combustible GLP se compone principalmente de propano y butano, por lo que el tanque de almacenamiento debe cumplir con ciertos estándares de seguridad.
Muchas instalaciones para GLP vienen con un dispositivo de detección de fugas para garantizar la seguridad. Estos dispositivos detectan fugas de gases licuados de petróleo y encienden una luz de advertencia. Si se detecta una fuga, se recomienda encarecidamente que se abandone el área y se llame a los servicios de emergencia para que revisen la instalación e investiguen la causa. La instalación GLP también incluye un sistema de bomba para transferir almacenar gas GLP del tanque al vehículo cuando el motor está en marcha.
La instalación para GLP no solo puede ahorrarle horas de viaje, sino que también es un ejemplo práctico de recurso sostenible. A los usuarios que inicien una instalación GLP en su vehículo regular se les recomienda encarecidamente realizar una comprobación anual para garantizar la seguridad y la eficiencia de la instalación.
El gas licuado del petróleo (GLP) es un combustible conveniente para combustibles de transporte, esencialmente gasolina de origen petroquímico y representa en la actualidad una alternativa respetuosa con el medio ambiente frente a otros combustibles tradicionales como la gasolina o el diésel. El GLP tiene muchas ventajas para el uso diario, desde el ahorro de costes de combustible hasta su impacto medioambiental mucho menor.
Una de las principales ventajas de instalar un motor de GLP es el ahorro de combustible. Con el GLP se mejorará la economía del combustible en comparación con otro combustible equivalente, generalmente es hasta un 20% y es un combustible más eficiente. Una razón adicional por la que muchos usuarios optan por el GLP es su reducido impacto en el medioambiente ya que reduce las emisiones de óxidos de nitrógeno y monóxido de carbono en comparación con la gasolina y el diésel.
Sin embargo, a pesar de lo anterior uno de los principales inconvenientes del GLP es la inversión inicial que los usuarios deben hacer para realizar la instalación. La instalación de un GLP también requiere amplia supervisión desde el punto de vista de la seguridad para garantizar que no están presentes fugas de combustible que puedan afectar a la seguridad del usuario o del medio ambiente. Por otro lado, hay pocos mecánicos con formación en el mantenimiento de GLP lo que puede ser un problema para los usuarios. Finalmente, en algunos países, como Argentina, se requiere una licencia especial para conducir un vehículo con GLP, lo que representa una restricción generalizada.