Xenon es un tipo de lámparas de tecnología de iluminación en vehículos. Estas lámparas están compuestas de una mezcla de gases letales, incluido el xenón, y son las que aportan una luz mucho más blanca y brillante que las luces normales. Además de sus excelentes niveles de brillo, también son mucho más duraderas en comparación con los faros halógenos, lo que los hace ser más eficientes para el consumidor.
Visto comúnmente en los faros de coches modernos, el xenón se refiere a la luz emitida por elementos dentro de los faros. Esta luz es generada cuando dos potentes átomos de gas -xenón o kriptón- se ionizan con una descarga eléctrica. Esta luz posee una mayor calidad que la luz halógena, que es la que se utiliza comúnmente en los faros de los coches. El xenón proporciona una luz intensa y brillante, además de durar unos 3 veces más que la luz halógena.
Los faros xenón son una compra cara, pero los beneficios a la hora de conducir son muy significativos: La luz que emiten es mas blanca y viva, lo que les da un aspecto moderno a los coches en los que los lleva y les proporciona un mejor campo visual al conductor durante la noche.
Además, el xenón también contribuye a mejorar la economía de combustible de los coches pero, a diferencia de lo que podríamos pensar, no puede cambiar la potencia del motor para ahorrar gasolina. Lo que sí hace es reducir la cantidad de combustible que usan algunos sistemas electrónicos, como la iluminación o el motor.
El xenón fue descubierto en 1898, por William Ramsay y Morris Travers, quienes identificaron más de 10 elementos en la capa superior de la atmósfera. Debido a su alto punto de ebullición (109 grados Kelvin o -164 grados C), el xenón no se puede obtener fácilmente del aire. En cambio, la mayoría del xenón que se usa es producida a través de combustión de productos petrolíferos. El proceso de combustión crea un gas residual llamado nitrogén complejo que contiene trazas de xenón.
A partir de esto, la industria química ha desarrollado una serie de procesos para separar el xenón del nitrógeno. La mayoría de estas técnicas implican separar los compuestos por separado a partir del nitrógeno complejo usando adsorción en líquidos ligados a fluorocarbonos y el reciclado de los elementos nobles, seguido de una serie de procesos de destilación. Aunque estas técnicas son relativamente novedosas, se están volviendo cada vez más frecuentes en la producción de líquidos electrónica y aplicaciones médicas.
El xenón también se encuentra en la naturaleza como una rara mezcla de compuestos inorgánicos. Estos compuestos se producen en volcanes y en prisioneros subterráneos, a través de la descomposición de gas natural, o a través de la decoloración del petróleo. No hay ninguna forma conocida de producir xenón por sí solo.
El xenón es un gas utilizado en los automóviles para mejorar la visibilidad en la carretera. A través del uso de luces de xenón, los automóviles obtienen un mejor rendimiento de iluminación, ya sea en situaciones de mala visibilidad o para cumplir con normas de seguridad establecidas. Las luces de xenón también son más fuertes y más duraderas que las luces halógenas, lo que significa que son menos propensas a fundirse o agotarse.Las luces de xenón se invierten electrónicamente para proporcionar una mejor iluminación en todas las direcciones. Esto significa que el automóvil verá mejor la carretera en condiciones como lluvia y niebla. Estas luces también tienen un mejor control de ángulo, lo que significa que pueden ser ajustadas para diferentes situaciones o condiciones de conducción. La tecnología de xenón también garantiza que el automóvil se automatizará de manera más segura y a una distancia mayor.
Los faros de xenón también tienen la capacidad de resistir ruidos eléctricos y vibraciones, por lo que ofrecen una mejor resistencia a la fatiga. Esto significa que el conductor puede conducir con seguridad durante un largo período de tiempo sin tener que preocuparse de las luces fundidas o apagadas. Esta tecnología también es mucho más durable, ya que suletrece su forma al calor, lo que significa que son menos propensas a fundirse. Por lo tanto, son más adecuadas para aquellos que conducen con mucha frecuencia.
La tecnología de xenón también viene con algunas desventajas. Las luces de xenón no son tan resistentes al polvo, por lo que regularmente hay que limpiar las lentes para que sigan funcionando adecuadamente. Debido a que esta tecnología también se basa en el uso de corriente continua, los cables y bombillas son más delicados que con la tecnología halógena. Sin embargo, la tecnología de xenon es una excelente opción para producephrfaros de alta calidad que ofrecen un mejor rendimiento de iluminación.
Las luces de xenon se encuentran bajo el paraguas de la iluminación con halógenos, por lo que comparten muchas características del funcionamiento. Todos estos sistemas de iluminación utilizan la misma configuración de bombilla y reflector, pero los focos de xenon también incluyen una pequeña descarga eléctrica para encender un arco eléctrico dentro de la cámara del fuego. El arco eléctrico, a su vez, ilumina una portadora de gases (xenon) para producir una luz más brillante y más efficiente.
Estas luces tienen una luz más blanca y brillante que la de un sistema de halógeno típico, lo que se debe a que los gases de xenon están a una temperatura mucho más alta y estas combinan el tono blanco con el amarillo. Además, estas luces tienen una vida útil mucho más larga y pueden durar mucho más que una lámpara halógena tradicional.
Otra característica única de los faros de xenon es que emplean una tecnología de materiales reflectantes más nítida. Esto le permite a los faros de xenón provocar una luz mucho más brillante y controlada. Esta es una característica especialmente útil para los faros de xenón con un ángulo de luz ajustable, ya que los materiales reflectantes permiten un mayor control sobre la dirección en la que el faro emite luz.