Gasolina es el combustible líquido utilizado en un vehículo para hacerlo andar. Es una mezcla de hidrocarburos volátiles producida a partir del petróleo. Su principal función en los vehículos modernos es la de ser quemado en la cámara de combustión para proporcionar energía al motor, produciendo lo que se conoce como la fuerza cinética.
Gasolina es un término referente al combustible etiquetado como “Gasolina sin plomo” o “Gasolina Super” dependiendo del contenido de los octanos, el cual es una mezcla de diferentes hidrocarburos. Esta mezcla es usada como combustible para la mayoría de los vehículos a motor conocidos como automóviles.
Gasolina se ha usado en todo el mundo como combustible para vehículos desde la segunda mitad del siglo XIX, siendo en su momento, una de las Fuentes de energía más utilizadas para el transporte. Su función principal es permitir que el motor del auto trabaje mediante un proceso de combustión conocido como Ciclo Otto, el cual permite el movimiento del vehículo a través de la transmisión mecánica.
A diferencia de otros combustibles líquidos, la gasolina suele contener una concentración de compuestos químicos llamados octanos, los cuales determinan la cantidad de combustible necesario para realizar la combustión del motor, y la cantidad y calidad de humos que el automóvil emitirá al medio ambiente.
La gasolina, en su forma líquida, está disponible para los conductores a partir de estaciones de servicio. Existen estandarizadas en la mayoría de los países para que se ajusten a la ley vigente en cada lugar. Los vehículos con motor de combustible a gasolina generalmente usan gasolina sin plomo o plomo mezclado.
Las estaciones de servicio ofrecen diferentes tipos de combustible. Estos incluyen combustibles de alta octanaje, combustibles premium, etanol mezclado y combustibles diesel. Es importante considerar el nivel de octanaje al comprar gasolina. Distintos modelos de vehículos pueden requerir diferentes tipos de gasolina para poder operar. Al seleccionar el tipo adecuado de combustible, la cantidad de combustible debe ser suficiente para operar el vehículo adecuadamente.
Para garantizar la calidad del combustible, algunas estaciones de servicio verifican la calidad de sus combustibles utilizando los certificados de calidad para verificar la pureza y las descripciones del combustible. Comprueba el combustible al mismo tiempo, para asegurarte de que la gasolina que compras es la mejor para tu vehículo.
Cuando compres gasolina, recuerda que solo debes rellenar el tanque con la cantidad indicada. Para hacer esto, debes mantener los niveles recomendados para no sobrecargar tu vehículo. Esto puede reducir la eficiencia del combustible y hasta poner en riesgo la seguridad de tu vehículo.
La gasolina es un combustible de origen fósil cuyas características principales son su contenido energético, su octanaje y su contenido en azufre. Estas tres variables principales condicionan la calidad del combustible, así como sus propiedades de combustión en los motores.
El contenido energético de la gasolina está directamente relacionado con su poder calorífico. Una gasolina de mayor contenido energético producirá mayor cantidad de energía en forma de calor al ser consumida por un motor.
El octanaje es una medida empleada para comparar los efectos antiknock o antigolpe de las gasolinas entre sí. Un octanaje mayor incide positivamente en el rendimiento y vida útil del motor ya que impide la presencia de detonaciones precozmente respecto a una gasolina de octanaje menor.
El contenido en azufre tiene un efecto positivo sobre la combustión en los motores al permitir la variación de los parámetros de inyección sin grandes problemas. Por otro lado, también se debe tener en cuenta el efecto negativo que un nivel excesivo de azufre puede tener en el entorno por la contaminación que genera.
Por último, el contenido en plomo es otra de las características importantes a considerar al evaluar un combustible. La publicidad actual ha convertido a la gasolina sin plomo en el combustible por excelencia para usar en los diferentes motores, debido a la toxicidad que posee este elemento y su capacidad de dispersarse a través de la atmósfera.
La gasolina está compuesta por una mezcla de distintos hidrocarburos (compuestos químicos formados por carbono e hidrógeno). Algunos de estos hidrocarburos presentan una resistencia con efecto inhibido a la auto-encendido (llamada factor octano), mientras que otros lo hacen de forma espontánea.
El octanaje de la gasolina se determina a través de su grado de resistencia al auto-encendido, y se expresa en unidades de octano (RON). Estas unidades miden el nivel de resistencia o resistencia energética a la combustión.
Hay diferentes tipos de gasolina, que se caracterizan por tener diferentes grados de octanaje. Los principales tipos son:
Es importante tener en cuenta que el grado de octanaje especifica una calidad de la gasolina. Esto significa que entre una gasolina con un octanaje más alto y otra con un octanaje menor habrá una diferencia en sus características. Por ejemplo, una gasolina con un octanaje más alto producirá más potencia en la explosión interna del motor con el consiguiente ahorro de combustible, pero también aumentará el desgaste y los niveles de contaminación del motor.
Es importante usar el tipo correcto de gasolina según el nivel de octanaje que indique el fabricante del vehículo. Si no se hace así, ello podría dañar mecánicamente el motor y su rendimiento optimo no se verá reflejado, ya que quedaría limitado por el combustible que se esté consumiendo.