Un sensor de aparcamiento en un vehículo es un dispositivo digital ubicado en la parte trasera, que utiliza ultrasonido para ayudar al conductor a estacionar el vehículo. Esto se logra emitenciendo ondas ultrasónicas que detectan objetos a su alcance. Estas ondas son reflejadas sobre un vehículo o un objeto cercano y se reciben en el sensor. Los sensores emiten una señal de audio para avisar al conductor de la distancia que hay hasta el objeto. Esta característica resulta muy útil para el aparcamiento en espacios reducidos.
Un sensor de aparcamiento es un dispositivo electrónico destinado a asistir a los conductores al estacionar su vehículo, brindando información audible sobre la distancia existente entre el vehículo y los objetos cercanos. Estos sensores se pueden encontrar en la parte delantera y trasera de muchos vehículos, y suelen venir con algunas alertas visuales para ayudar al conductor con la apreciación de distancias. Estos dispositivos tienen la intención de reducir los daños potenciales, tanto para el vehículo como para los objetos cercanos, que pueden ser chocados al estacionar.
Los sensores de aparcamiento funcionan de manera similar a los sistemas de distancia de precaución en los automóviles: emplean un sensor para medir la distancia entre el vehículo y los objetos cercanos y envían esta información a una unidad de control. Esta unidad procesa los datos y en caso de que el espacio resulte insuficiente para el vehículo, envía una señal para provocar una advertencia audible. Algunos tipos de sensores de aparcamiento también incluyen alertas visuales como luces intermitentes o una pantalla de visualización de la distancia.
En la mayoría de los vehículos, los sensores de aparcamiento se conectan al sistema eléctrico general. Por lo general, los sensores tienen alcance limitado y se destinan para la detección de objetos cercanos cuando el vehículo está en dirección hacia delante o hacia atrás. Esto significa que, si el vehículo está estacionado erguido, el sistema puede detectar los objetos en las partes trasera y delantera del vehículo, pero no en los costados.
Un sensor de aparcamiento emitirá una alerta cuando detecte un objeto cercano al coche. Estas alertas pueden ser sonoras, visuales o una combinación de ambas. Cuando estás aparcando, la alerta te informará de la distancia entre el vehículo y el objeto detectado. Esto ayuda a los usuarios a controlar la distancia entre los lados del vehículo y el objeto, lo que significa que no hay sorpresas en el momento de la salida.
Además de sonar una alerta a la hora de aparcar, algunos sensores de aparcamiento también te advierten mientras estás conduciendo. En este caso, la alerta se activará si detecta un objeto a una distancia determinada. Esto ayudará a los usuarios a evitar los riesgos de una colisión con el objeto detectado cuando el coche esté en movimiento, permitiéndoles reaccionar a tiempo.
Algunos sensores de aparcamiento también pueden tener una función de puntero láser. Esta herramienta te permitirá ver exactamente hacia dónde se está dirigiendo el vehículo y su ubicación específica entre el objeto y tu coche. Esto te proporciona la mayor precisión para un parking seguro.
Cuando hablamos de aparcamiento asistido, el primer dispositivo que encontramos para ello es el sensor de aparcamiento. Estos sensores están diseñados para ayudar al conductor a aparcar su vehículo sin tener que no tener que dar vueltas al volante. Los sensores de aparcamiento son dispositivos con sensores ultrasónicos que detectan distancias y ayudan al conductor a aparcar el vehículo de manera segura con el mínimo esfuerzo.
Los sensores de aparcamiento se ofrecen en diferentes configuraciones, desde sensores simples y económicos hasta modelos avanzados y caros. Los sensores de aparcamiento populares incluyen sensores ultrasónicos, sistemas de cámaras de visión trasera, sensores de aparcamiento basados en GPS, y sistemas de aparcamiento automatizado.
Los sensores ultrasónicos se activan cuando detectan el reflejo de los objetos cercanos. Estos sensores usualmente se instalan en la trasera de un vehículo y envían ondas ultrasónicas al objeto detectado para determinar la distancia. Estos sensores se ofrecen en diferentes configuraciones, desde sensores monocromos hasta sensores con cuatro colores indicativos. Los sensores monocromos se activan cuando hay un objeto muy cerca, mientras que los sensores de cuatro colores cambian de color para indicar la distancia.
Los sistemas de visión trasera o de retrovisores de visión amplia en general cuentan con sensores traseros y cámaras traseras que transmiten imágenes en tiempo real al vehículo. Estas imágenes se muestran en una pantalla en el interior del vehículo, permitiendo al conductor ver los objetos detrás de él sin tener que dar la vuelta al volante. Además, estos sistemas generalmente combinan las cámaras con advertencias visuales o sonoras, para facilitar aún más el aparcamiento.
Los sistemas GPS basados en aparcamiento usan sensores para localizar la posición exacta del vehículo y utilizan datos del GPS para asesorar al conductor sobre la forma óptima de aparcar. Estos sistemas también enviarán señales de advertencia si el conductor se acerca demasiado a otros objetos durante el movimiento.
Por último, los sistemas de aparcamiento automatizado completan el proceso de aparcamiento para el conductor, regulando el volante y los pedales del vehículo para estacionar con precisión. Estos sistemas tienden a ser más caros y solo están disponibles en algunas marcas de vehículos.