El baricentro de un vehículo se refiere a su centro de gravedad, el punto en el que se concentra su masa y alrededor del cual gira. El centro de gravedad ideal puede ayudar a garantizar la estabilidad y movilidad del vehículo a lo largo de curvas y superficies accidentadas durante la conducción. La ubicación del baricentro depende del diseño del vehículo, por ejemplo, el tipo de motor, el peso y la disposición de los componentes.
El baricentro es el punto central de un vehículo, ubicado entre las ruedas delanteras y traseras, donde se concentran todas las fuerzas, cargas y momentos de un vehículo. El término también se conoce como el centro de gravitación. Esta es uno de los parámetros más importantes a tener en cuenta para evaluar la estabilidad y el comportamiento en carretera. De hecho, el baricentro es la base para el diseño de la suspensión, el alineamiento, la eficiencia y la maniobrabilidad. La ubicación del baricentro es crucial para una conducción segura. Esto es especialmente cierto si el vehículo posee tracción a las cuatro ruedas.
Un baricentro bajo proporciona más estabilidad al vehículo ya que el centro de gravedad de la carrocería se encuentra más cercano al plano de la pista. Esto significa que el vehículo se balancea menos y es mucho menos propenso a una pérdida de tracción o a patinajes. Sin embargo, un baricentro bajo también significa una menor capacidad de carga y un espacio menor para el equipaje. Por el contrario, un baricentro alto significa una buena simplicidad y eficiencia en la transmisión, así como mayor espacio para el equipaje. Por lo tanto, los fabricantes de automóviles buscan siempre encontrar un punto de equilibrio entre un baricentro alto y uno bajo.
Un baricentro bien ubicado dentro del vehículo, sin excederse ni ser insuficiente, ofrece mejoras considerables en la conducción. Primero, se disminuye el balanceo, el temblor y la posibilidad de bascular al pasar por una curva, lo que aumenta la seguridad del vehículo.
Segundo, se mejoran las características dinámicas del vehículo, ya que un baricentro mal ubicado aumenta la inestabilidad en la conducción a alta velocidad. Esto no solo se traduce en más seguridad, sino también en un mayor rendimiento a la hora de maniobrar.
Por último, el comportamiento del vehículo mejora mucho al posicionar el baricentro correctamente. Esto se traduce en una mejor eficiencia y un menor consumo de combustible, lo que implica que también se produce menos emisión de gases contaminantes al medio ambiente.
Es importante tener en cuenta la posición del baricentro a la hora de diseñar un vehículo para optimizar sus características de forma correcta. Si la ubicación del baricentro no se realiza adecuadamente, todas las características dinámicas del vehículo podrían verse afectadas negativamente y su seguridad y rendimiento serían muy inferiores.