Un canister en un vehículo es una parte importante del sistema de escape. Se usa para almacenar el combustible evaporado emitido por los combustibles de gasolina y diésel. Almacena los vapores de combustible hasta que se recirculan hacia el motor para su quema. En un motor de combustión interna, el canister ayuda a reducir la cantidad de vapores de combustible emitidos al medio ambiente, por lo cual se considera un elemento muy importante para el cumplimiento de los estándares de emisiones.
El término canister es una expresión inglesa que se refiere a un recipiente de metal resistente a la intemperie, generalmente cilíndrico, que es utilizado para recoger, almacenar y transportar cualquier cosa. Generalmente está fabricado con hierro forjado, acero u otro material resistente. El término canister también se usa en el sector automotriz para referirse al dispositivo ubicado en la parte trasera de un vehículo, en el que se almacenan, filtran y eliminan los gases de escape a través del sistema de escape.
En particular, los mecánicos usarán la palabra canister para referirse al canister de combustible, un dispositivo que se usa para almacenar combustible y controlar la cantidad de presión, humedad y vapor en el interior de la línea de combustible. Este dispositivo utiliza filtros de carbón para mejorar la limpieza del combustible y promover un funcionamiento adecuado. El canister de combustible debe estar sellado en ambos extremos para evitar fugas y garantizar la seguridad del vehículo.
El canister también se abreviará como TCC, que significa canister de control de combustible. Esto se debe a que el dispositivo también se usa para regular la fluidez del combustible. El canister TCC también controla la cantidad de oxígeno que entra al motor del vehículo, lo que ayuda a garantizar que el vehículo se mantenga a una temperatura y funcione de manera eficiente. El canister de control de combustible también debe sellarse y verificarse periódicamente por los mecánicos para evitar errores y problemas.
Un sistema canister está diseñado para recopilar los gases liberados durante el proceso de combustión de los vehículos de motor, recircularlos a través de un filtro, lo que evita que contaminen el aire. El sistema canister recoge los vapores expulsados a través del sistema de escape para detener la contaminación del aire. Los vapores entran al canister, pasan a través de un filtro y son recirculados en el sistema de combustible. El canister es una caja sellada hecha de materiales especiales que impiden que el vapor entre en el interior.
Los canister suelen estar compuestos por un filtro de carbón activo, el cual absorbe los gases crudos y los reenvía para evitar su emisión a la atmósfera. El sistema también utiliza una válvula solenoide para recircular los gases algunas veces durante el ciclo de combustión/encendido. Esta válvula permite supervacío en el sistema de combustible al controlar el flujo de los vapores a través del canister. Esto asegura la combustión óptima en el motor, lo cual evita posibles fallas en el sistema de encendido.
Los canister también juegan un papel importante en la mejora de la eficiencia de combustible del vehículo. La válvula solenoide evita el exceso de vacío en el sistema, lo que mejora la combustión y, como resultado, mejora el rendimiento general del automóvil al proporcionarle más potencia y economía de combustible. La presencia de la válvula de control de vacío también mejora el funcionamiento de los sistemas de vacío del motor, ya que hay un menor consumo de aire en estas partes del sistema. Esto, a su vez, mejora la eficiencia del combustible.