El recauchutado de un vehículo consiste en la reparación del neumático. Esto incluye el reemplazo de la goma del neumático y la sustitución de las lonas, así como la rellenación con una cámara de aire nueva. Esto se hace generalmente para mejorar la durabilidad del neumático y asegurar que se mantenga en buen estado. El recauchutado es una forma segura de mantener el vehículo en movimiento de forma segura y con el mínimo esfuerzo.
El recauchutado de neumáticos es un proceso en el que se retira el viejo caucho de los neumáticos, reemplazándolo con un compuesto de caucho nuevo. Esto mejora la vida útil de los neumáticos y puede ayudar a mejorar la economía de combustible, el manejo y la seguridad. Para mejorar estas ventajas y asegurarse de que el recauchutado tenga éxito, es importante asegurarse de que los neumáticos que se seleccionan sean adecuados para el recauchutado.
Neumáticos aptos para el recauchutado tienen una estructura fuerte y sana sin profundos desgastes extensos ni daños profundos, como cortes, golpes, abolladuras o decoloraciones por la edad. Estos neumáticos estarán equipados con chips de identificación adecuada con el código de dimensiones y carga correspondiente para el vehículo, cumpliendo de forma segura y precisa todas las normativas nacionales existentes. Si un neumático no cumple estos requisitos iniciales, entonces no es apto para el recauchutado y debe ser reemplazado por un neumático nuevo.
Además, es importante que los neumáticos sean inspeccionados visualmente antes del recauchutado. La junta, el talón del neumático y otros elementos, al igual que el interior del neumático, deben examinarse para identificar si hay daños existentes. Esto es esencial para asegurar que la calidad y la seguridad del neumático se mantenga después de haber realizado el proceso. La profundidad de los tacos y las bandas laterales también deben ser comprobadas para asegurar que el recauchutado sea exitoso.
En última instancia, los neumáticos aptos para el recauchutado son los que se encuentran en buen estado, cumplen los códigos de dimensionamiento y cumplen con todas las regulaciones nacionales. Estos neumáticos deben ser cuidadosamente examinados antes del recauchutado para asegurar su seguridad y rendimiento para el usuario.